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jueves, 1 de abril de 2021

Los investigadores descubren por qué el cerebro disfruta de la música

 

A pesar de no tener beneficios biológicos evidentes, los humanos aman la música

La comunicación entre los circuitos auditivos y de recompensa del cerebro es la razón por la que las personas encuentran la música gratificante, según una nueva investigación publicada en la revista 'JNeurosci'.

A pesar de no tener beneficios biológicos evidentes, los humanos aman la música. Los estudios de neuroimagen ponen de manifiesto las similitudes entre el modo en que los circuitos de recompensa del cerebro procesan la música y otras recompensas como la comida, el dinero y el alcohol. Sin embargo, los estudios de neuroimagen son correlativos por naturaleza.

En el nuevo estudio, los investigadores trataron de determinar el papel causal de estos circuitos mediante una estimulación cerebral no invasiva.
Un grupo de aficionados a la música pop escuchó un conjunto de canciones pop mientras el equipo de investigación medía su actividad cerebral con resonancia magnética. Antes de la exploración, el equipo excitó o inhibió indirectamente el circuito de recompensa del cerebro con estimulación magnética transcraneal.

La excitación del circuito de recompensa antes de escuchar la música aumentó el placer que sentían los participantes al escuchar las canciones, mientras que la inhibición disminuyó el placer. Estos cambios en el placer inducido estaban relacionados con cambios en la actividad del núcleo accumbens, una región clave del circuito de recompensa.

Los participantes con la mayor diferencia en el placer también mostraron la mayor diferencia en la actividad sincronizada entre las regiones auditivas y de recompensa. Estos resultados indican que las interacciones entre las regiones auditivas y de recompensa impulsan el placer que sentimos al escuchar música.


miércoles, 17 de abril de 2019

¿Qué trama Madonna?


La artista ha publicado una serie de imágenes que en conjunto muestran una X roja sobre fondo negro
Madonna tiene a sus fans expectantes después dehaber publicado una serie de imágenes en Instagram que, al verse todas unidas, muestran una X roja sobre un fondo negro.
También ha cambiado su foto de perfil en Instagram, donde tiene 13,3 millones de seguidores, mostrando ahora sus labios pintados de rojo con un palito negro apoyado sobre ellos.
Las teorías se entremezclan en estas últimas horas, con algunos fans asegurando que se trata de un proyecto secreto con Netflix, algo rechazado de pleno por otros. Incluso se asegura que ella será la invitada especial de Eurovisión 2019.

Imagen de Instagram de Madonna
Su esperado nuevo álbum, que será el decimocuarto -no el décimo, como podría indicar la X si esa fuera la explicación, se esperaba para finales de 2018, pero finalmente se ha retrasado sin fecha aún.
Ya han pasado cuatro años desde su hasta ahora último disco, Rebel heart, de 2015, y se sabe que Madonna está enfrascada en la preparación de su próximo lanzamiento, que podría ser inminente.
El pasado mes de febrero, Madonna y Maluma compartieron desde sus cuentas oficiales fotos tomadas en un estudio de grabación, por lo que lo que está claro es que la reina del pop está tramando algo.

jueves, 6 de abril de 2017

Las 10 canciones que los científicos recomiendan para relajarse


El estrés puede causar problemas de corazón e incluso Alzhéimer; con esta música, lo reducirás

En la vida cada cual tiene sus trucos para relajarse. Unos se dan una ducha, otros liberan tensión yendo al gimnasio o saliendo a correr, y hay quien cuida las plantas. La musicoterapia es una técnica más, que se basa en el poder reparador de la música.

Esta creencia tiene raíces que vienen de lejos. De hecho, algunas culturas indígenas que hoy perduran vienen utilizando desde tiempos ancestrales la música para mejorar el estado de salud de la gente enferma.

David Lewis-Hodgson, neurocientífico de la agencia Mindlab de Reino Unido, ha investigado cuáles son las canciones a través de las cuales se llega a un mayor estado de relajación.

Lewis-Hodgson ha hecho públicos los resultados de su experimento, y ha llegado a la conclusión de que las siguientes diez melodías son las más relajantes que se han compuesto hasta ahora. De hecho, la que ocupa el primer lugar, ´Weightless´ de Marconi Union, redujo en un 65 % la ansiedad total de los participantes en el test.

Y es que de hecho, la canción fue creada por el grupo Marconi Union precisamente para ser calmante. Para ello, colaboraron con un grupo de terapeutas del sonido. Sus sonidos de bajo, y las harmonías cuidadosamente arregladas, ayudan a reducir la presión sanguínea y la segregación de la hormona del estrés, el cortisol.

El estrés tiene efectos muy negativos en la salud de quien lo padece. Puede ocasionar problemas de corazón, obesidad, depresión, problemas gastrointestinales, asma y demás. Incluso como reacción natural del cuerpo, se pueden dar procesos gripales, Alzhéimer y diabetes, según una investigación llevada conjuntamente por Harvard y Stanford.

David Lewis-Hodgson advierte de los peligros de escuchar las canciones que a continuación siguen en un ámbito en el que haya que tener atentos los cinco sentidos, como puede ser el coche, puesto que el exceso de calma puede llevar a la somnolencia.


1. Weightless 
    Marconi Union
2. Electra
    Airstream
3. Mellomaniac - Chillout Mix
    Dj Shah
4. Watermark
    Enya
5. Strawberry Swing
    Coldplay
6. Please don't go
    Barcelona
7. Pure shoes
    All Saints
8. Someone like you
    Adele
9. Canzonetta sull'aria... Che soave zeffiretto (Duettino)
    Wolfgang Amadeus Mozart, Julia Varady, Helen Donath , Sir Colin Davis
10. We can fly
      Rue Du Soleil

   

jueves, 10 de octubre de 2013

Francia recuerda a Edith Piaf


Edith Piaf, que empezó cantando en la calle y en cabarets y acabó como artista consagrada que llegó a actuar en lo alto de la Torre Eiffel, murió hace cincuenta años, un aniversario que se cumple este jueves y con el que se rinde homenaje a una de las grandes voces de la música francesa. 

París recordará al alma de esta intérprete esencial de la canción francesa con un festival que hasta el domingo contará con actuaciones musicales en las calles de los barrios en los que vivió Piaf, según ha explicado Bernard Marchois, conservador del museo dedicado a la artista. 

Pese a su figura menuda -no llegaba al metro y medio de altura-, su andar patoso y sus vestidos siempre negros, la fuerza encima del escenario convirtió a Piaf en un icono de la canción francesa. El éxito musical fue acompañado de una cierta leyenda en torno a su figura: en el número 72 de la rue de Belleville de París hay una placa que recuerda el nacimiento de Piaf "en los peldaños de esta casa" cuando, en realidad, nació en un hospital cercano, según su partida de nacimiento. 

Sin embargo, es cierto que la artista francesa tuvo una niñez dura: fue abandonada por su madre y vivió con su padre, a quien acompañaba pasando el platillo cuando este actuaba como contorsionista en la calle. Durante la infancia, Piaf también convivió con su abuela materna, que trabajaba como domadora de pulgas en un circo, y con su abuela paterna, que regentaba un prostíbulo en Normandía. 

Gorrión 

A los 15 años, la joven parisina empezó a cantar en la calle, donde fue descubierta por el dueño del cabaret Gerny's, Louis Leplée, quien rebautizó a Edith Giovanna Gassion como la "môme" (muchacha)" Piaf" -que, en lenguaje familiar, significa gorrión- y le dio la oportunidad de actuar en su local. 

La carrera musical de este icono de la música francesa levantó el vuelo en los cabarets y 'music halls' parisienses, donde consiguió un gran reconocimiento y llegó a actuar en salas emblemáticas como Pleyel y Olympia. Sin embargo, detrás su éxito musical se escondían las dificultades, como la muerte de su única hija, Marcelle, a la que tuvo con 18 años, víctima de una meningitis a los dos años. 

" Edith Piaf cantaba su vida", ha señalado Marchois, quien considera que estas experiencias vitales hicieron que en lugar de interpretar temas "divertidos y alegres" optara por canciones sobre el amor, algunas de ellas tan conocidas como 'La vie en rose'. 

Vida tumultuosa 

Los triunfos profesionales fueron acompañados de una vida tumultuosa e intensa, con mudanzas constantes, dos maridos y numerosos amantes, aunque su gran amor fue el boxeador francés de origen argelino Marcel Cerdan, de quien se enamoró en Nueva York, una ciudad en la que Piaf siguió forjando su leyenda y donde cosechó grandes ovaciones, como las del Carnegie Hall. 

Pocos años después, Cerdan falleció en un accidente de avión y su muerte marcó a la cantante francesa, que se dejó llevar por la fatalidad abusando del alcohol y la morfina. A pesar de la decadencia física, la artista francesa tuvo fuerzas para dar diversos conciertos en la sala Olympia, en la que había actuado en sus inicios y que empezaba a tener problemas financieros. 

En una entrevista publicada algún tiempo antes de fallecer, Piaf formuló un deseo -"no me gustaría morirme vieja"- que se convirtió en presagio, ya que murió en el sur de Francia, acompañada de su segundo marido, Theo Sarapo, a los 47 años, a causa de un fallo hepático. 

La muerte no puso punto final a su leyenda, ya que los discos de Piaf se siguen vendiendo y en su tumba, situada en el cementerio parisiense de Père Lachaise, cada día hay flores frescas que recuerdan a la interprete de 'Je ne regrette rien' (No me arrepiento de nada). 

La influencia de Edith Piaf en la música francesa no se explica sólo con su discografía porque la diva impulsó también las carreras artísticas de otros intérpretes, como Charles Aznavour y Georges Moustaki. La vida de Piaf ha sido llevada a la gran pantalla en la película 'La vie en rose', ganadora de cinco premios César y un Oscar a Marion Cotillard como mejor actriz principal.

Fuente: El comercio

miércoles, 20 de marzo de 2013

Piratería



¿Daña la 'piratería' a las ventas de música digital? Un informe de la Comisión Europea dice que no 


 Un nuevo estudio del Joint Research Centre de la Comisión Europea viene a decir que la llamada 'piratería' digital de música no afecta de manera negativa a los ingresos por la venta de música digital. 
 Se trata de una conclusión que, aunque no es nueva, choca con los últimos datos que la industria cultural esgrime para pedir un endurecimiento de las medidas contra las descargas no autorizadas de contenidos.
 Este informe, realizado sobre los hábitos de navegación de 16.000 ciudadanos de Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y España, ve una relación positiva entre la 'piratería' en línea y las visitas a las tiendas de música legal, y concluye que la industria de la música "no debe ver la 'piratería' como una preocupación creciente", informa TorentFreak. 
 El estudio ha sido realizado por el Instituto de Prospectiva Tecnológica, con sede en Sevilla, que forma parte del Joint Research Centre de la Comisión Europea, y mide la relación entre las visitas a sitios de descarga de música no autorizados frente a opciones de pago, o bien de música en 'streaming' con autorización. Los resultados apuntan a que existe una relación directa: a más visitas a sitios considerados 'ilegales', más visitas a sitios 'legales'. 
 El artículo que resume el informe concluye que la mayoría de la música que se consume 'ilícitamente' por los individuos de la muestra no habrían sido compradas si los sitios 'ilegales' no hubieran estado disponibles. Además, los investigadores consideran que los sitios web de 'streaming' gratis y 'legal' no canibalizan las compras legales de música, y de hecho parecen estimular dichas compras. 
 No obstante, recuerda el Blog Salmón que "existen diferencias significativas entre los países" . "En España e Italia, por ejemplo, el número de 'clicks' en páginas de descarga gratuita de música fueron mucho mayores que en el resto de países", apunta, y añade: "En 'clicks' a páginas legales de contenidos, España fue segunda por la cola, sólo superada por Italia". ¿Es una cuestión de oferta? 
 El estudio ha suscitado la reacción de expertos como el profesor del Instituto de Empresa Enrique Dans, quien en un post en su blog sostiene que si en España se descarga más desde sitios no autorizados o ilícitos es, "sencillamente, porque la oferta que la industria permite es un desastre: incompleta, cara, incómoda y respaldada por una panda de energúmenos vociferantes e insultantes que inspiran cualquier cosa menos el consumo de sus productos".

miércoles, 9 de enero de 2013

David Bowie rompe diez años de silencio



El cantante británico ataja los rumores sobre su salud con el lanzamiento por sorpresa de un nuevo sencillo 

 El cantante británico David Bowie lanzó ayer, día en el que cumplió 66 años, un nuevo sencillo y anunció un próximo disco para esta primavera, con lo que pone fin a diez años de silencio, informaron los medios británicos. «Where are we now?» («¿Dónde estamos ahora?») es el nombre escogido para el nuevo sencillo de Bowie, ya disponible en iTunes, que el cantante reveló a sus fans en Twitter a través de su cuenta oficial, @DavidBowieReal. 
 «Echad un vistazo a la página web, creo que tenemos una gran sorpresa... Si es que aún no habéis tropezado con ello», indicó en un «tuit» que deriva a su sitio en internet, que también ha sido renovado para la ocasión. 

 La reaparición de Bowie pilló por sorpresa a sus fans, que en las primeras horas desde el anuncio han llenado de comentarios el videoclip de «Where are we now?» en Youtube. 

 Retirado de los escenarios desde 2006, cuando efectuó su última actuación en público, sus apariciones han sido tan escasas que no tardaron en aparecer rumores sobre su estado de salud, siempre desmentidos por su círculo más cercano.

 El videoclip del tema, escrito por el veterano y camaleónico músico, es obra del artista multimedia Tony Oursler, en el que puede verse la cara de Bowie proyectada sobre un muñeco mientras de fondo aparecen imágenes del tiempo que el cantante pasó en Berlín, antes de la caída del Muro en 1989.

 El sencillo es un adelanto de lo que podrá escucharse en el que será el vigésimo tercer disco de estudio del cantante, «The next day» («El día después»), que saldrá a la venta en marzo, tras una década desde la publicación de «Reality».

 Bowie, considerado uno de los músicos más relevantes de las últimas décadas, saltó a la fama a finales de los años sesenta con «Space oddity», coincidiendo con el año de la llegada del hombre a la Luna. Desde entonces, la música de Bowie ha pasado por todas las etapas musicales que han recorrido las últimas cuatro décadas, experimentando con el rock, el soul, el funk y la electrónica.

 La última de las invitaciones que recibió para actuar en público fue para participar en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de 2012, pero un desencuentro con el director artístico de la gala, Danny Boyle, canceló finalmente el proyecto.

lunes, 10 de diciembre de 2012

Paloma San Basilio se despide de la música con un "hasta siempre"



Su adiós musical, aunque a ella no le guste la palabra, durará todo 2013, cuando tiene previsto realizar una extensa gira de conciertos que le permitirá despedirse de su público español y del latinoamericano 

 No siente nostalgia, tampoco tristeza por la decisión tomada, decir un "hasta siempre" a la música, a la que ha dedicado más de 40 años de su vida, y es así porque Paloma San Basilio está llena de proyectos para la nueva etapa vital que ahora inicia. Y de entre todos ellos destaca uno: la pintura. 

Sí, la pintura, una afición de infancia y juventud que, después de permanecer dormida durante mucho tiempo, hoy se ha convertido en pasión, desde que hace ocho años decidiera pasar largas temporadas en su casa frente al mar de Cádiz, donde amigos pintores no pararon hasta conseguir que retomara los pinceles. "Voy a pintar porque me gusta pintar", comenta por teléfono Paloma San Basilio a Efe desde su refugio en el sur. 

La decisión de pintar -"mis obras son abstractas, con mucho color y hasta ahora sin firma", precisa- y de exponer por vez primera en su vida -el próximo día 14 en Sevilla, en Caixafórum- es paralela a otra en la que ya venía pensando desde hace tiempo: poner fin a su carrera musical. Decir "hasta siempre" a algo que fue también pasión, la música, y durante cuatro décadas. 

"Prefiero decir hasta siempre que adiós. Es más bonito, suave, sutil... Es un cambio de ciclo vital", argumenta la San Basilio al hablar de una decisión muy meditada. "Cada etapa en la vida -continúa- tiene unos componentes, unas necesidades, una filosofía. Y las mías en este momento son otras". 

Habla de la necesidad de "ir hacia adelante", de no quedarse parada nunca, "en ninguna etapa", algo que, asegura, ha hecho siempre en su vida y que quiere seguir haciendo. "No hay excusas para quedarse quieto", insiste. 

Su adiós musical, aunque a ella no le guste la palabra, durará todo 2013, cuando tiene previsto realizar una extensa gira de conciertos que le permitirá despedirse de su público español y del latinoamericano. 

Una gira de agradecimiento a un público que le ha sido fiel durante tanto tiempo. "Me parece una ordinariez -bromea- irme de una casa a la que he sido invitada sin decir adiós". 

Y como huye de la palabra "adiós", Paloma San Basilio quiere que tan extensa gira de conciertos en ambas orillas del Atlántico lleve precisamente por nombre "Hasta siempre". "Quiero dar las gracias a la gente por seguirme, por estar ahí. Agradecer lo recibido". 

Paloma San Basilio se va, dice, en un buen momento de su carrera, "podría seguir, pero en otras direcciones", apostilla, con la voz intacta y una íntima sensación de paz. "Era -comenta- algo que venía gestándose dentro de mí. No es nada forzado. Siempre he hecho, y hago, las cosas en el momento en que he pensado que las tenía que hacer. Es algo natural, que va de dentro hacia afuera". 

Una decisión "natural, lógica, coherente" para dejar atrás una carrera que la ha llevado a los escenarios más prestigiosos del mundo, a grabar más de una treintena de discos, todos ellos superventas de oro o platino, a compartir escenario con muchos grandes (Plácido Domingo, José Carreras,...) y a atesorar más de treinta galardones. 

"No siento sensación de ruptura, ni de nostalgia. Me hace mucha ilusión recuperar la libertad, que cada día es un bien más preciado", reflexiona en voz alta Paloma San Basilio, que habla con apasionamiento de la etapa vital que ahora se cierra. 

"Ha sido larga y maravillosa, apasionante, sorprendente y me ha aportado también mucho como persona. Me ha hecho ser quien soy ahora. ¡He visto tanto, sentido tanto,...!", recuerda ahora, cuando está a punto de dejar los escenarios. 

Escenarios que sólo volvería a pisar en situaciones excepcionales, si, en su condición también de actriz, le ofrecen un papel interesante, "sin que tenga que cantar", puntualiza, o si la llaman para participar en un concierto benéfico. 

"He ido a cara descubierta, sin apoyarme en nada, sin oportunismo y sin utilizar a nadie para avanzar. Me siento orgullosa de ser como soy, de nadar a contracorriente cuando ha sido necesario, de ser coherente y honesta. Nunca hice nada en lo que no creyese", afirma quien asegura haber sido "fundamentalmente feliz" con la música. 

En cuarenta años "ha habido más ratos placenteros que sinsabores. ¡Sí, por favor!. Ha habido dolor a nivel personal, por la pérdida de muchos seres queridos", comenta quien, además de pintar, quiere escribir, "relatos cortos", precisa, viajar de verdad, no como ha hecho durante su vida artística, y dedicarles mucho más tiempo a su hija y a sus dos nietos, Neo y Alma, que viven en California. 

Un lugar en el que piensa pasar no menos de cuatro meses al año, para estar con los suyos y para mostrar, "¿por qué no?", su nueva faceta de pintora. 

"Cuando voy desprendiéndome del pasado ¡me siento tan ligera!", comenta Paloma San Basilio. "Soy de las que tiran todo con el paso de los años. Hay que aligerar nuestro equipaje vital. Casi siempre vamos cargados; de sentimientos, emociones, vivencias... Es como una tela de araña viscosa en la que muchas veces nos dejamos atrapar".

miércoles, 29 de agosto de 2012

Avalanch se disuelve


"Nos hemos dado cuenta de que debemos echar pie a tierra y detener esta aventura", explican en un comunicado 

 La banda asturiana de metal Avalanch ha anunciado este miércoles a través de un comunicado su disolución "con el sabor agridulce de un ciclo que termina". "Tras todos estos años repletos de momentos gratificantes, conciertos inolvidables, discos que son parte de la banda sonora de nuestras vidas, amigos en infinidad de países... nos hemos dado cuenta de que debemos echar pie a tierra y detener esta aventura que es Avalanch", explican sus miembros. 

"Es una decisión difícil de tomar pero consciente y llena de coherencia, tras años de trabajo ininterrumpido en los que hemos conseguido alcanzar metas nunca imaginadas. La tomamos con la satisfacción de haber creado un legado forjado con el corazón, compartido con todos aquellos que habéis sentido en alguna ocasión nuestras canciones", prosiguen. 

Eso sí, plantean que no saben "si esto es un punto final o tal vez un punto y aparte", algo que "el tiempo dirá". "Siendo sinceros con nuestros sentimientos", la banda quiere transmitir a sus seguidores "la intención de cesar indefinidamente la actividad en este momento dulce" de su carrera. 

Los miembros de Avalanch, que próximamente se despedirán compartiendo escenario junto a Scorpions, recalcan la "buena relación" que existe entre todos ellos, "compañeros y amigos de mil y una aventuras, con cientos de conciertos y miles de kilómetros a sus espaldas, que han servido para consolidar su amistad y profundo respeto". 

"Somos conscientes de las suspicacias que pueden generar este tipo de decisiones, pero nos daremos por satisfechos si nuestros fans confían en este mensaje de unión que queremos transmitir y que muchos de vosotros habéis podido comprobar, incluso personalmente, a lo largo de estos años", explican. 

Finalmente, Alberto Rionda, Fran Fidalgo, Marco Alvarez, Chez García, Ramón Lage y Dany León trasladan su gratitud a todos sus seguidores a lo largo de los años: "Siempre estaréis en nuestros corazones".

domingo, 24 de junio de 2012

Marlango, el optimismo como defensa


El grupo apuesta por la esperanza en su quinto álbum, 'Un día extraordinario' 

 Apasionado, luminoso, feliz. Desde su título, "Un día extraordinario", el quinto álbum de Marlango deja clara su apuesta por la esperanza contra el desánimo global. 

 No desde un punto frívolo ni naïf, más bien por supervivencia. "No van a secuestrarnos la alegría", aseguran. 

 Por convencimiento, y por paternidad, porque "tener hijos te obliga a ser positivo, a valorar lo que tienes, que es mucho", afirman Leonor Watling y Alejandro Pelayo, dos de los componentes del trío que completa el trompetista Óscar Ybarra. "Los niños viven siempre en ´modo alegría´. 

 Y ése debe ser el punto de partida, que luego todo se complica", afirma Pelayo, teclista y compositor, padre de un pequeño de 4 años que "me obliga a vivir el presente y con pasión". 

 Lo mismo le ocurre a Watling, actriz y madre de dos hijos, junto al músico y actor Jorge Drexler. 

 Ella es la letrista de los doce temas del álbum. El primero en castellano, "una lengua más compleja que el inglés para enlazar con las melodías", a la que les empujó, sin saberlo, Fito Páez, una noche bonaerense, al animarles a escuchar a gente como Chavela Vargas. 

 El resultado es un trabajo de orfebrería que respira lucidez -"todo es tan importante que ya no importa nada"- y pasión: "ser el corte de tu herida,... y la cura de tu pena", como canta "Si fuera otra", el tema que Watling dedica a Almodóvar. "Le quería hacer un regalo. Él me ha acercado al folclore español".

 Musicalmente, es un disco "menos abrigado que los anteriores; aquellos vestían de domingo, éste va en tejanos y camiseta". 

 Los temas ya suenan en una gira que el grupo aguardaba con inquietud, "eso no se pierde, espero" y ganas: "actuas por necesidad personal. 

 Y es un lujo que alguien quiera escucharte", agradece Watling. ¿Y si algo fuera mal? ¿Hay un plan B? "Creo que tengo tantos planes B que por eso soy actriz".

jueves, 21 de junio de 2012

Bruce Springsteen dio el concierto más largo de su vida en Madrid


Fernando Navarro 

 El concierto de Bruce Springsteen y la E Street Band el pasado domingo 17 de junio en Madrid ya se puede decir que es histórico. El músico estadounidense, a través de su página web, ha confirmado que su actuación en el Estadio Santiago Bernabéu fue la de más larga duración en sus 40 años de carrera. Las 3 horas y 48 minutos que estuvo sobre el escenario del recinto madridista pasan a la historia personal del cantante, y de la de muchos de sus fans que discutían desde esa noche si era el más largo o no de los centenares de conciertos ofrecidos de los setenta. 

 Por duración, el concierto de Madrid estaba disputándose su lugar en la historia springsteeniana con uno de la Nochevieja de 1980 en el Nassau Coliseum de la ciudad de Union, en el Estado de Nueva York, donde Springsteen llegó a las 3 horas y 45 minutos. Seguidores estadounidenses apuntaron rápidamente que habría que revisar las grabaciones porque era posible que, en los bises finales cortados antes de tiempo en los discos piratas, se llegó a superar por algún minuto esa cifra de 3 horas y 48 minutos. 

 El director de la revista española dedicada al músico norteamericano Point Blank, Salvador Trepat, aseguró al autor de este blog que todo indicaba que era el más largo de su vida, pero estaba a la espera de confirmarlo 100% con expertos de Springsteen que trabajan para la revista musical Backstreets, la publicación más prestigiosa sobre la obra y vida del creador de Born to run. 

 Algunos fans españoles señalaron por las redes sociales y en este blog de La Ruta Norteamericana que en los ochenta ya hubo conciertos que duraron unas cuatro horas pero hay que recordar que, por entonces, había descansos cercanos a la media hora en mitad de la actuación. En el concierto del pasado domingo, el grupo al completo descansó apenas cuatro minutos y esas 3 horas y 48 minutos fueron íntegras de música, sin parones largos. 

 Pero Springsteen se ha encargado de disipar las dudas en esta disputa solo apta para fans. El espectáculo de la Nochevieja de 1980 en Nassau fue el tercero de tres noches (28, 29 y 31 de diciembre) de actuaciones en un recinto ante unos 16.000 espectadores. Se encuadraba dentro de la gira tras la publicación del doble álbum, The River. Fue uno de los tours más intensos y grandiosos del músico, donde el cantante de Nueva Jersey y la E Street Band se ganaron el calificativo por críticos y seguidores de máquina del rock. 

 Para el concierto de Madrid, en cambio, venían de descansar una semana en mitad de su gira europea y, a la vista de los resultados, cogieron más que fuerzas para hacer el concierto más largo de sus vidas. Casi cuatro horas de show para tocar 32 canciones, entre composiciones del nuevo disco, Wrecking Ball, clásicos imperecederos (Born to run, Born in the USA, Thunder Road, Hungry Heart...) y auténticas joyas de su enorme cancionero (Spanish eyes, Be true, Spirits in the night o ese Talk to me con la colaboración de Southside Johnny, que estaba de gira por España y se subió al escenario como si el tiempo retrocediese a finales de los setenta). También tuvo tiempo de dedicar la canción The River a Nacho, un fan de 20 años fallecido de cáncer días antes de acudir al concierto de su ídolo. 

 Sprinsgteen, camino de los 63 años, acostumbra a hacer conciertos de más de tres horas, donde la intensidad y el repertorio no suelen defraudar a su público. Ahora, su techo está en las cuatro o, para ser exactos, en las 3 horas y 48 minutos. La pregunta, entre sus fans, es: ¿cuánto durará el récord? Poco o nada importa mientras siga la música, que vale mucho más por los termómetros emocionales que hace subir que por los cronómetros de tiempo que marca.

martes, 19 de junio de 2012

Es The Boss. Y punto


A sus 62 años, cada vez que Bruce Springsteen sube a un escenario da la sensación de estar ante su primer y último concierto 

  PEDRO ZUAZUA

 Si uno piensa en las personas de más de 60 años que conoce, seguramente escaseen los perfiles de gente capaz de dar un concierto de casi 4 horas. Alguno podría intentarlo, pero claro, la cuestión es hacerlo con dignidad. Bruce Springsteen (Nueva Jersey, 1949) se plantó ante más de 50.000 personas en el Santiago Bernabéu y demostró que, para esa reducidísima estirpe de genios de la que forma parte, los 60 son los nuevos 20. 

 Cuando Springsteen salió al escenario, a través de las pantallas se podía ver la imagen de un sexagenario. Al fin y al cabo, es lo que es. El tiempo, desgraciadamente, pasa rápido para todos. La grada se percató de ello. En su caminar, en sus movimientos y en algunos gestos de su cara parecía intuirse un atisbo de vejez. 3 horas y 48 minutos después los viejos éramos los allí presentes, a los que nos costaba seguir el ritmo de aquel tipo que, ya con los primeros acordes de Badlands, aclaró que no está dispuesto a jugar el papel del cuadro en El retrato de Dorian Gray. 

 Hubo altibajos, desde luego, pero si uno echaba un vistazo al césped o a la grada, se encontraba únicamente caras de felicidad. Grupos de amigos que bailaban los temas abrazados, sin mirar para el escenario, miles de manos que se movían al unísono, estribillos coreados con una extraña mezcla de fervor, pasión y automatismo (han hecho más por el aprendizaje del inglés algunas de sus canciones que muchas legislaturas) y una sensación general de que lo que rodea a este tipo alcanzó hace mucho el nivel de religión. Los feligreses, ataviados por lo general con el variadísimo merchandising que acompaña al músico, son una mezcla muy variada en la que predomina el chico o chica que, en su fuero interno, sueña con ser un trampero pero que sabe que lo más cerca que estará de conseguirlo será cantando Born to run. 

 Los músicos que hacen de la presentación de su banda una parte del concierto tan entretenida como cualquier canción tienen algo diferente. Springsteen la lleva a cabo con cariño, sencillez, entrega y agradecimiento, y desde ese momento la comunión con la grada es ya absoluta. Él presenta a su familia, abre las puertas de su casa y, entonces sí, empieza la fiesta. 

 Hubo tiempo para que demostrara que sabe leer dignamente en español, encontró un momento para dedicar una canción a Nacho, un joven fan español fallecido hace algunos días, y también para recordar a Clarence Clemons, pero no tiró de sensiblería. Sacó a dos niños al escenario y los trató como el típico tío enrollado de las series americanas e incluso dejó una escena para el recuerdo cuando un cartel que rezaba “Peralejos de las truchas” (localidad de la provincia de Guadalajara) permaneció unos hilarantes segundos a sus pies mientras todas las cámaras enfocaban al Boss y el público aplaudía lo absurdo de la situación. 

 No dejó de sonreír ni un solo momento y, una vez más, parecía que era, al mismo tiempo, el primer y último concierto que iba a dar en su vida. Muchos pagaríamos por ser él un solo minuto. No por la fama, la adoración del público y la erótica del escenario, que también, sino porque da la sensación de estar disfrutando tanto con su profesión que uno se hace una idea de la felicidad bastante cercana a lo que puede vivir él en esos momentos. Todo ser humano debería tener derecho a ver al menos una vez en su vida una canción de Springsteen en directo. Entienda o no el inglés, le llegará algo que no está en las letras ni en la música, pero que le hará sentir mejor. Nadie sabe lo que es, no se puede definir y mucho menos envasar, pero él lo tiene. 

 La segunda mitad del concierto fue antológica. Nadie se quería ir. Y tampoco hubiera podido, porque no había descanso entre canción y canción. Era imposible porque lo que estaba sucediendo sobre el escenario no era música, era magia. Ahí apareció el mejor Bruce, que de repente se había quitado 35 años de encima y parecía decir en cada canción: “¿Por qué creéis que me llaman el Boss?”. Por conciertos como el del Bernabéu, sin duda. 

 Y es que el de Springsteen es uno de los mejores motes de la historia. Tenemos que estar agradecidos de que hayan sido los americanos los encargados de ponérselo porque, de haber salido de España, se hubiera quedado con “El puto amo” para toda la vida. Que sí, que lo es, pero ya nada hubiera sido lo mismo. Es The Boss. Y punto.

viernes, 15 de junio de 2012

Metallica busca al asesino de una joven desaparecida tras un concierto


El cantante de la banda, James Hetfield, graba un vídeo en el que llama a encontrar al hombre que mató a una estudiante en 2009

 Más de dos años después de que los restos de la estudiante Morgan Harrington fueran hallados en un descampado, el grupo musical Metallica ha hecho un llamamiento, mediante un vídeo, a sus seguidores y a los ciudadanos con el objetivo de encontrar al hombre sospechoso del asesinato de la joven. Harrington desapareció el 17 de octubre de 2009 y fue vista por última vez a la salida de un concierto del grupo californiano en el Estado de Virginia.

 Este documento es parte de una campaña lanzada esta semana por el FBI que tiene como fin impulsar la aparición de nuevas pruebas. El asesinato y secuestro de esta alumna de 20 años, estudiante de la Universidad Virginia Tech y nacida en la ciudad de Roanoke, “conmocionó al Estado de Virginia”, han dicho las autoridades.

 

 “Tras la desaparición de Harrington nuestra banda ofreció una recompensa de 50.000 dólares por cualquier indicio que llevará a su secuestrador. Más tarde, restos de la joven fueron encontrados en un descampado. Desde entonces, pocos han sido los avances en la investigación”, explica James Hetfield en un vídeo de 53 segundos de duración. En aquel momento, la banda publicó la noticia en su página web y contactó a la familia de la joven.

 Hetfield, además, explica en el vídeo que la policía ha encontrado indicios de que el mismo asesino cometió otro suceso en Virginia en el año 2005. “Las pruebas de ADN coinciden en el caso de una mujer de 26 años violada y asesinada”, han especificado las autoridades en un comunicado.

 El secuestrador y supuesto asesino de la joven es un hombre de raza negra con el pelo también negro y con barba, “por lo menos en el momento del ataque”. Su altura es casi de dos metros y su edad, en el momento del crimen, estaría entre los 25 y los 35 años. “Si ves a este hombre -el vídeo muestra un dibujo del supuesto culpable-, cualquier indicio, contacta a la policía de forma inmediata. Existe una recompensa de 150.000 dólares por cualquier información que se dé del caso”.



La madre de Harrington ha asegurado al página web local Roanoke.com que se siente emocionada por la medida: “Estamos muy agradecidos, esperamos que algo nuevo salga a la luz. No buscamos venganza, queremos evitar que le ocurra lo mismo a otra mujer”. 

 Como parte de la operación de búsqueda, cientos de dibujos del sospechoso serán colgados en las paradas de autobús de Washington, el Distrito de Columbia es limítrofe con el Estados de Virginia, y en centenares de carteles publicitarios digitales de las ciudades de Roanoke y Richmond. Además, las ilustraciones del supuesto asesino estarán presentes en 23 Estados más a lo largo de la costa este. 

 El FBI ha informado de que ya se habían hecho campañas similares en el país, “que han dado lugar a distintas detenciones como el caso del violador James Whitey Bulger, quien fue arrestado en la zona de Boston”.

martes, 5 de junio de 2012

Venezuela impide la entrada al país a la banda española Sôber

 
  Según la promotora de la banda sus miembros "fueron tratados como delincuentes". Tuvieron un policía custodiándolos, sin poder dormir ni acceder a su equipaje 

 La banda madrileña de rock alternativo Sôber ha debido suspender los dos conciertos que tenía programados en las ciudades venezolanas de Caracas y Valencia los pasados días 1 y 2 porque les fue negada la entrada en el país "pese a tener toda la documentación en regla". 

 La promotora de la banda explica hoy en un comunicado que los miembros del grupo musical "fueron tratados como delincuentes, con un policía custodiándolos, sin poder dormir ni acceder a su equipaje" en el aeropuerto internacional caraqueño Simón Bolívar. 

 Sôber tenía prevista la primera de las actuaciones el pasado día 1 en la capital venezolana, y, pese a haber seguido en España las indicaciones burocráticas del Consulado, los músicos se vieron obligados a permanecer en el aeropuerto y cancelar ambos conciertos, sin haber recibido un porqué de la negativa. 

 La promotora venezolana trabaja ya en la devolución del dinero y, en los próximos días, informará en relación con las entradas adquiridas a través de tuticket.com y otros puntos de venta. 

 "Todavía estamos intentando solucionarlo todo y viendo qué se puede hacer. Si tuviéramos la seguridad, la idea sería volver a intentar programar conciertos en Venezuela", ha explicado la productora Last Tour International. 

 La banda Sôber tiene previsto su próximo concierto en la plaza de Biscós, de la ciudad oscense de Jaca el próximo día 28, una actuación gratuita dentro de una gira que pretende "atender las peticiones" de los seguidores y ofrecerles un homenaje con uno de sus primeros discos, Morfología (1999)

sábado, 2 de junio de 2012

Robert Plant, la voz del rock Slash

El «ex» de «Led Zeppelin» mantiene su vigencia con sus diversas andaduras musicales 

 «Robert Plant & The Band of Joy» era una formación de los orígenes musicales donde el «ex» de «Led Zeppelin» comenzó a dejar su sello. Esa gran voz de Plant, si no la mejor voz del rock duro, tiene una obra contundente y está llena de matices: capaz de adaptarse una pieza de aire latino o una country, por citar algunas de sus aventuras en los últimos tiempos. 

 Hay, al margen de la deslumbrante historia de «Led Zeppelin», otra etapa de varios años, también deslumbrante, y muy sólida, junto a su colega de «Led Zeppelin», Jimmy Page (Page and Plant), que hizo vibrar y disfrutar a los millones de fans que añoraban la banda que puso en la órbita el hard rock y sonidos colaterales. 

 Hace unos años (2007) que Plant deleitó al personal afín con «Raising Sand», disco junto a Alison Krauss y con una banda liderada por T-Bone Burnett. Fue un álbum muy celebrado y condecorado como disco del año, además de ser bendecido en los premios «Grammy». El disco que Plant hizo con la estrella del country fue como una gran fiesta para la afición. Se encontraba la combinación de la voz dulce de Krauss, con la «atenorada» (hablamos de rock, entiéndase) de Robert Plant. Aunque, eso sí, en «Raising Sand», Plant cambio su «volumen vocal» y se adaptó perfectamente. 

 Bien, las buenas noticas siguen corriendo en torno a Plant con «Robert Plant & The Band of Joy», un proyecto de hace un tiempo que ahora se revive merced a las grabaciones para un célebre programa de televisión. Programa grabado en Tennessee (EE UU), para una emisión que se dedica a rescatar históricos de la música popular. Y como tal se rescata todo el recorrido y conceptos artísticos de Plant. 

 Para que no haya dudas la apertura de esta sesión es «Blag Dog», posiblemente la canción más enérgica del rock; y prosigue con otros «homenajes», como el ambiente hispano con «Angel Dance», una pieza de los «Lobos», que ya en su edición primaria en disco sonó mucho como single. Hay que ver y oír a Robert Plant dándole gusto a su voz sin dejar que pierda parte del poso latino. Y así con otras perlas que aparecen en la grabación televisiva como «Ramble on», magnífico golpe a su pasado (reproduce en otro tono vocal pero igual de enérgico) o «In the mood», un tanto meditabunda. Es decir, de todo un poco con mucha genialidad, calidad y gusto por hacer bien las cosas. Digamos que es el rescate del espíritu del disco de 2010 por la vía de la imagen. 

 Y a la par está de nuevo en ebullición su colaboración con «Lil' Band O' Gold», que ya venía de años atrás en el homenaje Fats Domino. Ahora con Lucinda Williams.

martes, 22 de mayo de 2012

Hasta el Boss tiene problemas

Springsteen, Madonna y Coldplay ya no llenan estadios en cuestión de horas. Los Ayuntamientos ni contratan ni pagan y el sector está en plena “glaciación” 

 Contaban las crónicas que el Bruce Springsteen que apareció en Sevilla el pasado domingo estuvo pletórico. Mucho mejor, decían, que en sus últimas visitas. Pero en esa primera cita de la gira española de su nuevo disco, Wrecking ball, se apreciaban zonas vacías en el Estadio Olímpico La Cartuja. Una portavoz de la organización hablaba entonces de 3.000 entradas sin vender, aunque hubo quien elevó esa cifra hasta 10.000, un 25% del aforo. 

 ¿El Boss pinchando en taquilla? No es posible. Hablamos de un artista que en 2008 llenó dos veces el Camp Nou. 72.000 billetes en menos de ocho horas; 153 entradas por minuto. Pero en 2012, cuando se escriben estas líneas, aún hay tickets disponibles para las citas de San Sebastián y Madrid. No llenó ni en Las Palmas de Gran Canaria, ni una de las dos noches de Barcelona, que esta vez es en el Estadi Olimpic. Desde allí, por teléfono, mientras Springsteen prueba sonido, Dani Gutiérrez, de la promotora Doctor Music, niega la mayor. “En Sevilla en 2009 se vendieron 30.000 y este año han sido 34.000. En Barcelona, apenas queda nada. En el Santiago Bernabéu de Madrid hizo un sold out entonces, y este prácticamente ya está. En San Sebastián la situación es parecida. En resumen: se está vendiendo prácticamente lo mismo, aunque es cierto que no tan rápido”. 

 Lo de vender “prácticamente lo mismo” pero no tan rápido no es un problema de Springsteen. Le está pasando a Coldplay, Madonna, Lady Gaga o The Black Keys. Hace apenas un año había que estar muy despierto para conseguir una entrada para uno de esos grandes acontecimientos, más sociales que artísticos, que son los conciertos de rock de estadio. Se anunciaba el día de la venta y el billetaje volaba. En 2012 duran semanas. 

 Y no es un problema menor. La necesidad de hacer un sold out, venderlo todo, hasta el último ticket de la grada más alejada, no es ni por capricho ni por avaricia. Este es un negocio arriesgado en el que el único que nunca pierde es el artista, que cobra su caché pase lo que pase. “Parece que los promotores hinchamos el precio de las entradas. Pero no es así. El coste lo marca el caché de los artistas”, dice Roberto Grima, codirector de la sucursal española de Live Nation, el gigante mundial del directo. “Estamos jugando a hacer siempre sold out. En cuanto quedan 1.000 entradas sin vender entras en pérdidas”. 

 1.000 entradas cuando se han puesto 56.000 a la venta, como en el caso del concierto de Coldplay del hoy en el Vicente Calderón, no parece mucho margen. El viernes quedaban 1.117 boletos disponibles en Ticketmaster, la web propiedad de Live Nation, que posee la exclusiva de la venta. Muchos de ellos provienen de esa última remesa que se pone a la venta cuando, tras instalar el escenario, se suelen descubrir espacios con los que no se contaba. Si se vendieran todos significarían unos nada desdeñables 67.000 euros extra. 

 Ni siquiera los grandes conciertos de artistas internacionales, los que en argot se conocen como Triple A, se libran de la crisis. Una tendencia preocupante. ¿Recuerdan el cambio de paradigma motivado por Internet? Una industria, la de la venta de discos, en descomposición, de la que, en teoría, se salvarían los artistas que apostaran por los directos. 

 Pues parece que no. A principios de año A.R.T.E., la asociación de Representantes Técnicos del Espectáculo, que agrupa a más del 80% de los profesionales que se dedican a la música en directo en España, cuantificaba la deuda de los ayuntamientos en 70 millones de euros. Los municipios llevaban 30 años siendo los grandes clientes de las empresas de música en vivo en España. Con la caída del presupuesto de festejos casi a cero en 2012, más las facturas sin pagar de los espectáculos contratados en 2011 y 2010, la situación roza la hecatombe. En marzo, Emilio Santamaría, presidente de A.R.T.E., era de lo más explícito: “Estamos al borde de la extinción. Ha llegado la glaciación y nos ha pillado en calzoncillos”. 

 ¿Ha habido una burbuja del directo? “No sé si llamarlo burbuja, pero sí que es cierto que muchas bandas han estado cobrando cantidades muy elevadas que solo se sostenían con sponsors o dinero público. Ahora que escasean los dos estamos viendo que muchos grupos no pueden seguir haciendo tantos conciertos como antes, tienen que rebajar las entradas, cancelar conciertos o tocar en recintos medio vacíos”, dice Alfonso Santiago, de la promotora bilbaína Last Tour International. “Es necesario dosificar a los artistas, no es posible hacer grandes giras cada dos o tres años en cinco o seis ciudades de España. Quizás en otro momento lo pudo llegar a ser, pero en 2012 no es posible. La pérdida de poder económico de la sociedad y el paro complican mucho las cosas”, explica Alfonso Santiago. 

 Él predica con el ejemplo. Esta semana, uno de sus artistas, el grupo Extremoduro, anunció su gira de 2012. No han editado disco nuevo, ni hay planes de que lo hagan, pero es su primer tour desde 2008. Siete conciertos en otras tantas ciudades. Las entradas, a unos 25 euros, se pusieron a la venta el miércoles. Y han ido bien, relativamente. En Valencia agotaron en horas. Aún quedan para los otros seis. Pero siete conciertos no son demasiado comparados con los casi 50 de la gira de 2008. 

 Con todo, él aún puede aspirar a llenar grandes recintos.Otros artistas, como Fito, han optado por una medida intermedia. El cantante vasco que fue creciendo y creciendo durante la pasada década hasta llenar sin pestañear recintos para 15.000 personas en cada capital de provincia, ha optado en 2012 por una gira otoñal por teatros. “Es cierto que en casi todos los casos las 2.000 primeras entradas que se venden son las más caras. Los mejores asientos. Muchos artistas, inteligentemente, han pensado que arriesgarse a ir a un pabellón para que no se llene no es buena idea. Quedan mal y corren muchos más riesgos”. Por ejemplo, Fito ha decidido que es mejor cobrar 60 euros por 2.000 entradas que la posibilidad de poner a la venta 6.000 por 20 euros y tocar en auditorios medio vacíos. “A la gente no le cuesta pagar un poco más por estar cómoda que estar en un lugar masificado”, dice Roberto Grima. Live nation, su empresa, es la responsable del directo de Coldplay en el Vicente calderón de hoy. Las entradas más caras cuestan, agárrense, 229 euros. “Es un paquete llamado golden ticket, cada vez más habitual. Hay un público, 500 o 1.000, que está pagando por el asiento, el catering y una buena cena en el mismo recinto. Está funcionando”. 

 Por supuesto, la gran culpable es la omnipresente crisis. “No digo nada nuevo si apunto que la recesión está retrayendo el consumo. Por supuesto que la gente se corta mucho más a la hora de comprar entradas. Se sigue queriendo ir a conciertos, pero el público se lo piensa. Ya no hay esa alegría que había antes. Y los artistas como Springsteen, que han venido varias veces en poco tiempo, son los que más se resienten”. 

 El asunto entonces, ya que todos coinciden en el diagnóstico, es cuál debe de ser la respuesta de las empresas a esta situación. “Aquí hay muchos modelos diferentes de concierto. Son muy distintos los gratuitos, los de sala, los de estadio... En grandes conciertos y festivales estamos viendo que se pretende cobrar lo mismo o más cada año en las entradas y, sin embargo, la economía está bajando a niveles de principios de 2000. Para hacerlos sostenibles hay que plantearse si no habría que adecuar el precio a la economía real”, aventura Alfonso Santiago. 

 Es cierto ese detalle: no todos los conciertos son iguales. Los mánagers y promotores de artistas pequeños y medianos también se resienten, pero de otra manera. “Es el momento de estar en las trincheras, pero es que yo siempre he estado ahí, y me siento cómodo”, dice Miguel Ángel Garrido de GIGnTIK, la agencia que representa a Russian Red. “Se venden un 20% menos de entradas. Las salas ya no contratan sino que alquilan y tú te arriesgas a la taquilla. Olvídate de que corran con los gastos de alojamiento... Bueno, se trata de ajustarte a lo que hay, como todo el mundo”. Parecido piensa Juan Santaner, de Marxophone, el sello del cantautor Nacho Vegas. “Los artistas hechos, los que juntan a 1.000 personas, lo siguen haciendo. Pero los más pequeños si antes llevaban a 200 ahora quizás sean 50. Las salas están sufriendo mucho en la barra. No solo hay peor taquilla, también se gasta menos en el bar una vez dentro”. 

 ¿Es el momento de ir a lo seguro o de arriesgar? Y lo más importante, ¿qué es lo seguro y qué es lo arriesgado? “Todo ha cambiado mucho en meses. Mira el caso de Coldplay. Pusimos las entradas a la venta en Navidades, con su nuevo disco todavía calentito, y se vendió casi todo en tres semanas. Ahora me lo pensaría antes de poner a la venta el mismo espectáculo para septiembre. Hay que estar con los pies en el suelo”, señala Roberto Grima. 

 Los pies en el suelo significa que quizás vuelva a vivirse la polaridad que ya se conoció en los ominosos tiempos de Operación Triunfo. “Vamos a sufrir todos, pero creo que más los de clase media que no quieran renunciar a sus estatus. Noel Gallagher llenó a 25 euros, Kings Of Leon, también. Más caro lo dudo”, asegura Grima. 

 Es decir, que los Triple A seguirán llenando, aunque a otro ritmo. Los de trinchera seguirán peleando y sobreviviendo. Pero la clase media y, sobre todo, la clase media alta se resentirán. Ya lo están haciendo. La Asociación de Promotores Musicales (APM) asegura que durante 2011 el número de conciertos experimentó un descenso del 18,3% respecto al año anterior. La facturación bajó un 12,6%. 

 Hay menos giras, se reduce la oferta. “La gente prefiere ir a festivales”, asegura Juan Santaner. “Por un poco más de lo que le cuesta un concierto ve una docena de grupos en dos días”. Los festivales siguen siendo la gallina de los huevos de oro, pero quién sabe durante cuanto tiempo. En 2011, en Reino Unido, fueron cayendo como fichas de dominó. En España habrá que esperar. Quizás no mucho.

lunes, 21 de mayo de 2012

Muere Robin Geeb

Inconfundible falsete de los Bee Gees. Junto a sus hermanos formó parte de uno de los grupos con mayor éxito del pop mundial

 Robin Gibb, de 62 años, componente de los Bee Gees, murió este domingo tras un largo periodo en el que había sufrido continuos problemas de salud. Las pistas de baile sufren una semana de pérdidas: solo tres días antes fallecía Donna Summer, reina de la música disco.
 Barry, el mayor de los Gibbs, y Robin (Douglas, Isla de Man, 1949), la voz más reconocible de los Bee Gees gracias a sus famosos falsetes, formaban junto al hermano gemelo de Robin, Maurice, el trío, fundado en Australia en 1960. Eran tres de los cinco hijos de un músico de Manchester que tuvo que emigrar a Brisbane con toda la familia en 1958 huyendo de las duras condiciones de la posguerra.
 En los 43 años que el grupo se mantuvo en activo (se disolvió en 2003, cuando Maurice murió en el quirófano de un paro cardiaco mientras se le sometía a una intervención para corregir una obstrucción intestinal) cambiaron de estilo en varias ocasiones. Llegaron a lo más alto por primera vez en 1967. Entonces triunfaron como grupo de pop vocal con éxitos como To love somebody o Massachussetts. Mantenían un espectacular ritmo de trabajo.

 

 Súmese a eso las giras y los roces inherentes de cualquier grupo familiar y el resultado es un gran caos: crisis nerviosas, enfermedades, despido de los miembros que no se apellidan Gibb, demandas del mánager. Y deserciones para empezar carreras en solitario. Amaga primero Barry, el guapo, pero es Robin el que se larga en 1969. Poco más de un año después, en 1971, regresó.
 Ahí se produce otro cambio de tercio. Según avanzan los años setenta, los Bee Gees se orientan a la conquista del mercado estadounidense. El productor Arif Mardin les va moldeando y pasan a integrarse, da la impresión de que casi sin notarlo, en la música disco.
 En 1977 les piden temas para Fiebre del sábado noche. La película convierte a John Travolta en un mito y el doble elepé vende decenas de millones de copias. Así lo recordó Robin en EL PAÍS: “Nos pidieron urgentemente cuatro canciones, tras contarnos por encima el argumento. Aprovechamos cosas que teníamos grabadas y les mandamos cinco: Stayin’ alive, Night fever, How deep is your love, Jive talkin y You should be dancing. Lo curioso es que no les gustaron demasiado, pero ya no tenían otra opción. Pusieron pegas incluso al título de Stayin’ alive”. Los Bee Gees se convierten en los reyes del pop mundial; el apellido tiene tanta fuerza que hasta el hermano menor, Andy, se transforma en una estrella. Él será el primero de los Gibb en fallecer, en 1988, con solo 30 años.
 En la misma entrevista, Robin justificaba la longevidad del grupo: “Un grupo que dependa de autores ajenos siempre estará limitado. Por el contrario, nosotros éramos tres personas muy competitivas que teníamos que justificar cada canción que traíamos a los ensayos. El hecho de ser hermanos también ayudaba. Yo dejé al grupo en 1969, nuestro mánager me demandó y hubo muchas historias desagradables que superamos por los lazos fraternales. Dicen que los grupos de hermanos siempre se llevan mal, pero éramos tres y las malas vibraciones se neutralizaban”.
 En los últimos tiempos Robin Gibb había bajado su perfil de músico para dedicarse a otros menesteres menos artísticos. En 2010 fue reelegido en Bilbao presidente de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC).
 La CISAC es una organización que representa a más de tres millones de compositores. “Quiero aprovechar este nuevo mandato para colaborar en el desarrollo de un sistema permanente de gestión de derechos de los creadores en la era digital”, dijo.
 Durante toda su enfermedad, Gibb se había mantenido fuera de los focos, hasta febrero de este año, cuando declaró a la BBC que se encontraba “mejor que nunca”. Sin embargo, a mediados del pasado abril cayó en coma a causa de una neumonía que contrajo durante el tratamiento de un cáncer de hígado y colon detectado en otoño de 2010, tras una operación para corregir idéntica afección intestinal que la de su hermano Maurice.
 Pocos meses antes de agravarse su enfermedad, Gibb estaba preparando la presentación en directo de su primera obra clásica, The Titanic requiem, compuesta a medias con el menor de sus tres hijos, Robin John, de 29 años. Era un homenaje a las víctimas del Titanic. Para su estreno estaba previsto que codirigiera la orquesta.

jueves, 17 de mayo de 2012

La reina del disco, Donna Summer muere a los 63 años

La reina de la música disco, Donna Summer, ha fallecido en Florida a los 63 años al perder su batalla contra el cáncer, según informa el portal estadounidense especializado en 'celebrities' TMZ.

La cantante trató en todo momento de mantener el grado de su enferdad lejos del foco público, y mientras luchaba contra la enfermedad, estaba ocupada tratando de finalizar el nuevo disco en el que estaba trabajando.  

La ganadora de cinco Premios Grammy dejó para la posteridad éxitos tan recordados como 'Last Dance', 'Hot Stuff', 'Bad Girls', 'She Works Hard for the Money' o 'This Time I Know it's for Real'.

martes, 24 de abril de 2012

«The Beatles», imágenes de los sesenta a subasta


Veinte fotografías en blanco y negro de los «Beatles», que permanecieron durante casi 50 años en un álbum familiar, serán subastadas el próximo 19 de mayo en Stockport, en el condado inglés de Cheshire (noroeste de Inglaterra). Las instantáneas, que no han sido vistas ni publicadas hasta la fecha, fueron tomadas en Londres a finales de los 60 y se pondrán a la venta junto con sus negativos originales en la casa de pujas Omega Auctions. La banda de Liverpool sigue siendo una mina de noticias.

viernes, 20 de abril de 2012